La 'cara B' del nuevo iPhone X: se rompe en un golpe y el modo horizontal trae problemas de visualización

Los primeros tests no hablan demasiado bien del nuevo terminal de Apple: un solo golpe sería necesario para que tanto su pantalla como su parte trasera de cristal se rompa.


Era el iPhone más esperado en años, después de una racha en la que Apple venía practicando cambios muy leves tanto en el hardware como el software de cada modelo que la empresa de Cupertino presentaba.

El décimo aniversario del concepto iPhone traía consigo lo que parecía una verdadera revolución: una pantalla "sin bordes" -aunque la muesca negra situada en la parte superior de la pantalla sigue trayendo de cabeza a los más puristas del diseño- y nuevas funciones como el reconocimiento facial, la incorporación de Animojis -la versión animada de los famosos emojis- y una cámara que, pese a que es exactamente la misma que la del iPhone 8, incorpora una nueva lente de calidad superior, todo ello dentro de un diseño en cristal, radicalmente distinto al duradero acero que venía utilizando la empresa en sus anteriores móviles, visto el problema que había traído utilizar el vidrio en el ya lejano iPhone 4.

Pues los problemas parece no haberse solucionado: los primeros test que webs de reviews como Cnet han practicado no hablan demasiado bien de la durabilidad del nuevo modelo, cuyo precio básico parte de los 1200€: al primer golpe -no demasiado fuerte, sino simplemente el golpe que se llevaría el móvil si se nos resbalara de la mano mientras lo estamos utilizando- la parte trasera resultó dañada, craquelándose el cristal en varios pedazos. La pantalla también se vio afectada por el primer golpe: la parte inferior del vidrio se vio afectado.

Esto supone un verdadero problema, ya que reparar este nuevo iPhone es más costoso que los anteriores: el AppleCare -el seguro que ofrece Apple para sus productos, previo pago del mismo- tiene un coste de 200€, que se sumarían al coste inicial del iPhone. Si no has contratado ese producto, cambiar la parte trasera del teléfono te supondrá un coste de unos 500€. Los chicos de Cnet han observado que teniendo cristal tanto en la parte frontal como en la trasera, las posibilidades de que el teléfono resulte dañado en una caída se duplican, y los materiales no parecen estar preparados para soportarlo, y prueba de ello es el estado en el que ha caído el teléfono en la primera caída, de tan solo 0,9m de altura.

Además, los usuarios han observado ciertos cambios que la nueva pantalla no soporta demasiado bien: el modo "horizontal" en diversas aplicaciones todavía no soporta la nueva pantalla sin bordes, y trae problemas en los controles de la interfaz, aunque se espera que en las próximas actualizaciones los desarrolladores se pongan manos a la obra y solucionen el problema.

No hay comentarios

Con la tecnología de Blogger.